Harley-Davidson Sportster S 2023

Harley da un paso al futuro con la siguiente iteración de la legendaria Sporster. Con una mayor dosis de deportividad, sin sacrificar el alma de crucero, este moto te ofrece más posibilidades a sus mandos, pues puedes conducir más agresivamente e incluso ajustar la suspensión fácilmente. Queda muy claro que Harley tiene la mira puesta en el nuevo milenio.

Si estás buscando una moto crucero económica y elemental, diseñada para recorridos rápidos por la ciudad, has venido al lugar equivocado. Harley Davidson Podría haber construido esa motocleta, pero decidió no hacerlo. Y aunque la Sportster S estará encantada de llevarte de un semáforo a otro y luego a casa, Harley-Davidson siempre tuvo la intención de que esta moto fuera algo más que eso. 

Presentada en 2021, la Sportster S reafirma el compromiso de Harley con una gama renovada y totalmente moderna, y con un enfoque de hoja limpia en los nuevos modelos. Actualizar la plataforma basada en el motor refrigerado por aire Evolution  no sería suficiente incluso si apaciguara a los leales a Sportster y extendiera un legado iniciado en 1957. Tampoco habría tenido sentido una nueva plataforma refrigerada por aire desde el punto de vista de la fabricación, ya que Harley-Davidson ha invertido mucho en el nuevo motor Revolucion Max que lleva la Pan America. Modificar el Rev Max y usarlo en diferentes modelos ayuda a amortizar los costos asociados con el diseño, desarrollo y ensamblaje de una plataforma de motor completamente nueva.

Entonces, si bien la Sportster podría ser una de las historias de mayor éxito de Harley-Davidson y una de las motocicletas producidas continuamente durante más tiempo en la historia (se vendieron más de 50,000 modelos al año entre 2012 y 2017), es importante reconocer que la Sportster S tenía ser diferente. Una mirada a la hoja de especificaciones y te darás cuenta de lo diferente que es.

El motor Revolution Max 1250 de 1,250 cc es el foco aquí. Apodada Revolution Max 1250T, esta versión del V-twin de 60 grados refrigerado por líquido de Harley utiliza válvulas y puertos más pequeños y una forma de cámara de combustión diferente a la de la Pan America 1250, para aumentar el torque a bajas y medias revoluciones. Harley dice que el par motor aumenta un 10 por ciento entre 3,000 y 6,000 rpm en comparación con el motor Revolution Max 1250 de la Pan America.

El motor cumple una doble función, actuando como un miembro estresado del chasis y eliminando la necesidad de un bastidor tradicional. En su lugar hay un bastidor delantero, un bastidor intermedio y un basculante que se montan directamente al motor, que está diseñado para ser rígido para que pueda actuar como un componente del chasis. Y si bien eso podría limitar cuánto puede personalizar el constructor doméstico la Sportster S, este diseño tiene beneficios, el mayor es el peso reducido y un “chasis” comparativamente rígido que se adapta mejor a una conducción enérgica.

Más pistas sobre el enfoque de H-D de priorizar el rendimiento vienen en forma de frenos Brembo y suspensión Showa; la Sportster S rueda sobre una horquilla de cartucho invertido de 43 mm totalmente ajustable y un amortiguador con reserva totalmente ajustable con ajuste de precarga hidráulica. Sí, sólo hay un disco de freno delantero, pero al menos está acoplado a una pinza de 4 pistones. Lo más desafortunado es que la suspensión trasera tiene sólo 2.0 pulgadas de recorrido, lo que contribuye a la postura baja y robusta de la moto, pero no ayuda mucho a suavizar los golpes del camino. Los viejos hábitos no mueren fácil, y aquí Harley reconoce que la postura aún importa.

Construir una Sportster más deportiva y no equiparla con las últimas ayudas electrónicas al conductor sería un despropósito, por lo que Harley-Davidson arrojó todo lo que tenía en la Sportster S. Hay tres modos de conducción preprogramados (Sport, Road y Rain) disponibles junto con dos personalizables con opciones para mapa del motor, frenado del motor, respuesta del acelerador y control de tracción. Esos modos personalizados no solo aumentan la versatilidad de la Sportster S, sino que también ayudan a distinguir la más cara Sportster S de la “básica” Nightster, que viene sólo con los tres modos de conducción preprogramados de H-D.

El conjunto de ayuda al conductor Harley’s Cornering Rider Safety Enhancements (RDRS) agrega una capa adicional de seguridad; la Sportster S viene de serie con tecnología como control de tracción sensible a la inclinación con configuraciones Rain, Road y Sport. Todos estos sistemas se gestionan a través de una pantalla TFT de 4 pulgadas de diámetro y los últimos interruptores de Harley. Los conductores pueden conectar la pantalla a su dispositivo y auriculares Bluetooth, lo que les permite escuchar música, atender llamadas o incluso obtener instrucciones de navegación cuando usan la aplicación Harley-Davidson.

Manejo
La mejor manera de acercarse a la Sportster S es no pensar en ella como una Sportster o dejarse encasillar por lo que tu piensas que esta moto debe hacer. Con solo pasar una pierna por encima notarás su flexibilidad; un triángulo de conductor bastante cómodo te permite sentarte en una posición relajada, en el medio del asiento en una posición más erguida y dominante, o inclinado sobre el tanque en una posición de conducción más deportiva, perfecta para montar enérgicamente en un cañón. No estás encerrado en un lugar ni limitado por la tradicional ergonomía de las motos crucero, que harían que la motocicleta se sintiera fuera de lugar a medida que cambia el escenario.

Puede parecer extraño leer acerca de “llegar más lejos” en la Sportster S y “abordar los cañones”, pero eso es lo que sucede cuando tienes un motor que es tan capaz y divertido como el Revolution Max 1250T, que es, en muchos sentidos, la mejor parte de esta máquina. La apertura variable de válvulas marca la diferencia, permitiendo que el motor sea suave y controlable al ralentí, pero se abre cuando el tacómetro  digital supera las 4,000 rpm. Este es un motor de revoluciones extremadamente libres que no está limitado en ninguna situación, con una distribución de potencia utilizable y suficientes revoluciones por encima de las 7,000 rpm para evitar cambios constantes. Hay muy poco calor del motor o del escape alto. El único componente real que no nos encanta es el embrague, que tiene un tirón ligero pero una sensación limitada a través del recorrido de la palanca. Esto puede dificultar el arranque al salir de un semáforo, especialmente si estás usando uno de los modos de conducción que responden menos.

El motor cumple bien su función como elemento estructural del chasis, es decir, la moto se maneja sorprendentemente bien a medida que avanzas por una sinuosa carretera de montaña. La moto permanece plantada y equilibrada, lo que te permite tomar una curva de una manera que antes las Sportsters no podían hacerlo a menos que hubieras gastado miles de dólares en un catálogo de repuestos. El único problema es que el neumático delantero 160/70-17 y el manillar estrecho hacen que sea pesado de manejar, lo que limita la rapidez con la que puedes atacar una serie de curvas. Incluso agregar suavemente presión al freno delantero en una curva hará que la moto se levante, y hacer pequeños ajustes en la línea en la mitad de la curva requiere esfuerzo. Entonces no, esto no es una moto deportiva. Pero es una gran opción para el piloto que quiere perseguir a la KTM 390 Duke en una “crucero”.

Eso sí, ese motociclista encontrará otras limitaciones, siendo la mayor la suspensión trasera. Dos pulgadas de recorrido no son suficientes para suavizar caminos moderadamente llenos de baches, y no pasa mucho tiempo antes de que tu espalda comience a maldecir al equipo de diseño de Harley que decidió que esta era la mejor solución, ya que esencialmente no hay ningún cambio de suspensión que puedas hacer para mejorar ese limitado recorrido. Afortunadamente, la suspensión delantera Showa ofrece mucho más en cuanto a absorción de baches y agarre en carretera, y es bastante fácil de ajustar para obtener mayor apoyo durante la conducción enérgica. Una vez que regresamos a la carretera, simplemente retiramos la amortiguación de compresión y seguimos nuestro camino.

Una conducción más relajada te brinda la oportunidad de apreciar las áreas en las que Harley ha logrado avances en los últimos años, que en este caso significa el grupo de indicadores y la palanca de cambios. Esa pantalla está cubierta con vidrio no reflectante para que sea fácil de leer con cualquier iluminación, y el nuevo diseño de control que utiliza Harley-Davidson hace que sea increíblemente fácil navegar a través de las opciones de ayuda al conductor. Lo mismo puede decirse de la navegación por las opciones de música con los botones del lado derecho del manillar. Nos alegra no tener botones de señales de giro a cada lado del manillar, otra pequeña señal de que Harley está dispuesta a dejar algunas cosas en el pasado.

Quizás el mejor elogio que podemos darle a la Sportster S es que no te hace extrañar la vieja Sportster. Siempre habrá comparaciones con esa plataforma, claro, pero Harley-Davidson ha hecho bien en hacer que la Sportster S sobresalga de una manera que la vieja moto nunca pudo. Esta Sportster tiene el potencial de funcionar para más personas con diferentes habilidades y experiencias de conducción, ya que el potencial de rendimiento es mucho mayor que el de cualquier Sportster anterior.

Eso sí, el rendimiento y un paquete electrónico más amplio tienen un costo. El precio base para la Sportster S 2023 es de $16,399, un aumento de $2,900 sobre la no tan asequible Nightster básica, que tiene un precio de $13,499. No puedes evitar sentir que Harley-Davidson está ignorando a nuevos conductores potenciales con esta alta barrera de entrada. Como referencia, el precio para la Iron 1200 2021 era de solo $9,999.

La otra preocupación es cuánto afecta el recorrido trasero limitado a la experiencia. Esta es una plataforma realmente impresionante en términos de motor y manejo, pero eso importa muy poco si lo único que recuerda tu espalda baja es cada bache que atravesaste en tu camino hacia los cañones. Aquellos que estén dispuestos a sacrificar un poco de comodidad por una postura de crucero tradicional serán recompensados ​​con una moto totalmente moderna que ofrece un equilibrio entre estilo y rendimiento. Pero esa persona debe valorar más la potencia y la tecnología, porque eso es lo que define a la Sportster moderna.